Hace algún tiempo no escribía
nada, no porque no tuviese que contar, sino porque nos hemos enfocado muchísimo
en él tratamiento de Isaac y él desarrollo de Alejandro y creanme que esto
requiere de mucho tiempo, esfuerzo, dedicación, lagrimas, alegrías, rabietas,
carcajadas y demás...
En él mundo TEA contamos con
algunos obstáculos adicionales a los que comúnmente acompaña la vida, Debo
decir que hemos sido afortunados porque una vez detectamos la condición
especial de Isaac nos remitieron
directamente a cumplir con todo él
protocolo y proceso de rehabilitación, en gran parte porque mi esposo ha
trabajado en él sector salud. Él primer centro al que asistimos durante un mes
no cumplía con los estándares adecuados para él diagnóstico de Isaac, por eso
fue citado a Junta Medica con todo el grupo interdisciplinario que lo evaluó y
remitió a la IPS donde actualmente es atendido desde él 15 de Enero de 2018.
Caramba!!! Como ha cambiado mi
vida desde entonces!!! Si existe algo
que disfruto y amo es poder estar en mi
casa, así que comenzando porque tenia que ir 4 veces a la semana a terapias y
él sin número de citas para estudios, laboratorios y consultas con médicos
especialistas esos días de disfrutar leyendo, escuchar música, cocinar
tranquilamente, ver televisión, trabajar quedaron atrás o por lo menos bastante
disminuidos.... tenia que definir quien
podía ayudarme con el cuidado de Alejando que para entonces solo
contaba con 4 meses , hoy puedo ver como Dios ha provisto en su momento a cada
persona para confiarle el cuidado
de mi pequeñín, no fue y nunca será
fácil dejar a un hijo, así sea por unas horas… no se si me pasa solo a mi, pero
el lidiar con dos niños tan pequeños es agotador, extenuante y mi vida es lo
suficientemente agitada, para desear por momentos salir, distraerse sin niños,
pero cuando lo hago me siento literalmente incompleta, cada cosa me los
recuerda y siento que no disfruto plenamente…
así que cada tarde que salía con Isaac mi corazón se quebraba, mi alma
se dividía.
El proceso de adaptación de Isaac al centro de
rehabilitación fue bastante traumatico, durante un mes y medio llorábamos las 2 horas que correspondían a las diferentes
terapias, era agónico, y digo “lloramos” porque el lloraba en los salones y yo
lloraba en la sala de espera, mi corazón se quebraba, me sentía tan enojada por
todo lo que tenia que pasar Isaac, no era justo que esto le sucediera a mi
hijo, estaba tan nublada por MI tristeza, que solo podía verme rodeada de
personas resignadas, enfermeras y todo personal asistencial insensible. Cada
día salía con esa actitud de derrota e impotencia. Afortunadamente pronto iniciaría la vida escolar y con este
nuevo cambio la sabiduría de lo alto se hizo presente, muy contrario de lo que
pensábamos Isaac se adapto super bien al Jardín infantil, no tuvo episodios de
llantos y se apego a su maestra. Fue entonces cuando decidimos citar a reunión
a el grupo de terapeutas e indagar que pasaba con el proceso de Isaac e
intercambiar información sobre los gustos y preferencias del niño que les
permitiera tener empatía con el.
Los cambios se dieron
inmediatamente, Isaac David comenzó a ingresar sin berrinche, creamos un método
para que el no se alterara con mi presencia. Comprendí que en el proceso de rehabilitación
es fundamental que como padres o responsables de los menores tengamos los ojos
bien abiertos, tenemos que crear un puente efectivo de comunicación con sus
terapeutas y médicos tratantes y si se trata de ser “intensos” pues vale la
pena cada cosa por nuestros hijos, mientras pase por encima del respeto a las
demás personas.
Estoy segura que no solo aquí en
Colombia tenemos que luchar por nuestro sistema de salud, es una lucha
constante para conseguir citas, para que se respete el debido proceso de
atención, para que no se anteponga los tramites administrativo al paciente y su
integridad, hace menos de una semana recibimos la negativa de una acción de
tutela que interpusimos con el argumento mas pobre y vacío para dilatar un
derecho fundamental que tiene mi hijo por pertenecer a una población con
discapacidad. Es un panorama bastante desalentador al pensar que apenas
comenzamos y ya sentimos la negativa de estas entidades, pero en medio de todo
también nos encontramos con ángeles que nos han colaborado con mucho amor a
quienes agradecemos de todo corazón, podemos cometer errores en el camino en
nuestro afán de padres por querer dar lo mejor o en nuestro dolor al ver como
se juzga tan rápido sin nisiquiera saber lo que significa o lo que vivimos en
esta gran familia azul.
Quise escribir esto por varias
razones, principalmente porque al comienzo me sentí muy sola, sin orientación
con tanta información que consumir que si la dieta, que si los juegos, que si
el colegio, que si la restricción de ciertas actividades… mejor dicho…. Una
locura, pero la verdad a medida que he conocido a mas familias y personas que
tienen a hijos con capacidades diferentes, he comprendido que lo que yo me refería como
insensibilidad no era
insensibilidad, comencé a aceptar que no existen culpables, que no se
trata de meritocracia que no es resignación, que no se trata del dolor de
padres, que no se trata de que estés solo(a) a través de la experiencia de mi
familia he visto que el autismo de mi hijo ha sido el camino de sanación para nosotros,
porque debes despojarte de mucha basura que tenemos en la cabeza, cosas que no
vale la pena cargar en la vida y hacer lo imposible posible, de manera
sencilla, sin pretensiones y sobre todo sin juzgar.
Si usted atraviesa por la misma situación que nosotros no deje de analizar… “examinadlo todo y
retened lo bueno” como padres tenemos ese no se que, no se donde que no nos
cuadra, pregunte si tiene dudas, corrija si cree que tiene que hacerlo, no
trague entero, aunque el especialista crea que usted no tiene porque saber mas,
pregunte cuantas veces sea necesario, aunque lo tilden de inteso insista y
persista, exija sus derechos y cumpla con sus deberes, se tropesara con
personas adorables y otras “cara dura” antes de juzgalas indague y haga los
acercamientos pertinentes, pero sobre todo sepa reconocer sus errores y
agradezca cuando se encuentra con “la gente que le pone el alma”, ya lo dije en
una entrada anterior y es que solo Dios permite que la carga sea ligera y la
continuidad de la frase“examinadlo todo y retened lo bueno”
será “orad
sin cesar” (Si les interesa uno de mis pasajes favoritos de la Biblia 1
Tesalonicense 5:12-28) y repito una y otra vez permita que el autismo
sea sanación en su vida… esto también aplica para cualquier circunstancia de la
vida… y usted me dira… “El autimo no hace parte de mi vida ni familia”… quiero
decirle querido lector que si usted esta leyendo esto, ya mi pequeño Isaac
David ha influido en usted y hace parte de su conocimiento…. Lo que haras y
como actuaras es tu decisión… Sin Mas Pa’ alla y Sin Mas Pa’ Aca
Me parece muy bien que el autismo de tu hijo te ayude a crecer como persona y a tu familia. Dios te continúe dando la fortaleza y entereza que necesita tu hogar.
ResponderBorrarMuchas gracias! Es un proceso que apenas comienza con sus altos y bajos pero con los ojos puestos en Dios! Bendiciones!
ResponderBorrar