CAMINAR EN MEDIO DE LAS AGUAS

“Pedro entonces bajó de la barca y comenzó a caminar sobre el agua en dirección a Jesús.  Mateo 14: 29

En el contexto de lo que vivió Pedro en ese momento apenas es lógico la reacción que tuvo, ver a lo lejos alguien que camina sobre las aguas, creo que todos hubiéramos pedido una prueba que no era un fantasma como ellos creían, pero hoy vamos a meditar en las acciones de Pedro frente al pedido de Jesus.

La orden de Jesus fue no temas y ven, muchas veces acercarnos a Dios puede causar temor porque el estar cerca nos permite reconocernos al nosotros mismos como seres indignos de estar delante de su presencia, hoy quizás Jesus te está invitando a que salgas de la barca que puede ser esa zona en donde te sientes cómodo y donde aparentemente tu vida esta bien pero resulta que no esta acorde al voluntad de Dios por eso es necesario que dejes de ver fantasma y fijes tu mirada en Cristo Jesus.

Hace algunos meses vimos la esclarofiante noticia de una mujer que se suicidó y arrastro a su hijo en esa decisión, fue una noticia bastante fuerte su propio niño le pedía que no lo hiciera, me pregunte muchas veces porque no escucho a nadie y no soy quien para juzgarla solo Dios sabe lo que pasaba por su cabeza en ese momento, pero me dejo una gran lección, el temor no puede ser una excusa para no enfrentar las batallas que tenemos que librar.

El tomar la decisión de caminar por las aguas puede ser abrumador, por que la vida cristiana es diferente, porque este mundo te enseña que debemos odiar, pero Jesus te enseña que debes amar, por que este mundo te enseña que las cosas importantes son las que puedes ver, mientras que Jesus te enseña que lo que importa son las cosas que no se ven.  parece una vida imposible de vivir en un mundo tan distorsionado por el pecado, pero es precisamente esto lo que nos debe ayudar a tomar la decisión de bajarnos de la barca.

 El evangelista dice  "Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” Mateo 6:33. No permitas que el miedo, el viento o la tempestad nublen el deseo de buscar a Dios; nos es necesario tomar la decisión, aunque sintamos miedo debemos procurar convertir ese temor en un sentimiento que nos ayude a caminar sobre las aguas cada día, reconociendo que Jesus es el que está esperándonos con sus brazos abierto y que si en algún momento sentimos que ya no podemos Jesus estará allí para escucharnos cuando digamos: Jesus sálvame.

Recuerda la dirección correcta siempre es a Jesus.

Muchas Bendiciones y recuerda que lo que es imposible para el hombre es posible para Dios.

VICTOR ALFONSO VASQUEZ PADILLA.

MINISTERIO COMPARTIENDO CON VIDA