SUPERIORIDAD MORAL



"El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve, que lo haga por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén" 1 Pedro 4:11

Vivimos en un mundo donde buscamos siempre la aprobación de la sociedad y esta aprobación esta sujeta a lo que puedes demostrar que eres capaz de lograr y de esta manera vemos como el YO es cada vez más enaltecido.

En el texto de hoy nos hace una invitación a ser administradores de la gracia que nos es dada y que esta debe expresarse en función de glorificar el nombre de Dios, Pablo no los recuerda “Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno”

Para no caer en la superioridad moral debemos reconocer de manera clara que Dios es la fuente de todo Eclesiastés 11:14 dice “Todo viene de Dios” y el versículo 16 dice” Y es que Dios es tan bondadoso que concede sus dones a los buenos y siempre los hace prosperar”

El texto de Pedro nos hace reflexionar que todo lo que hagamos lo debemos hacer para glorificar el nombre de Dios , es decir reconocer que todo tenemos es porque así él lo ha querido, tu familia, tu profesión, tu trabajo todo absolutamente todo es por su voluntad, entonces la pregunta es si las cosas que tenemos son por voluntad de Señor, ¿Que nos hace creer que yo soy el que hace las cosas?... El trabajo del enemigo es mostrar que no necesitamos de Dios y agudizar "el efecto yoyo", yo soy el que hago, yo soy el que puedo y justo ahí dejamos de glorificar el nombre de Dios, por eso nuestras vidas deben ser entregadas al Señor siempre buscando agradarle.

Que en este día nuestra oración sea un ruego para librarnos de las tentaciones de la voluntad propia, esfuerzo propio y lucha propia, porque estas nos llevan a pretensiones de superioridad moral, que Dios nos ayúde a no tener mayor concepto de nosotros mismo que el que debemos tener y a recordar que *"El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve, que lo haga por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén" *

Muchas Bendiciones y recuerda que lo que es imposible para el hombre es posible para Dios.


VICTOR ALFONSO VASQUEZ PADILLA.
MINISTERIO COMPARTIENDO CON VIDA

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